Día 6 – Alsacia: Bergheim. Ribeauvillé. Colmar.

Hoy llegamos a Colmar, donde vamos a pasar las próximas tres noches. Pero antes, visitamos dos pueblos de cuento que se encuentran de camino, Bergheim y Ribeauvillé.

Bergheim es un pueblo menos conocido, así que la visita fue muy agradable, sin apenas turistas. Allí visitamos su muralla, el ayuntamiento y la casa de las brujas, donde tuvieron lugar juicios por brujería. Desde la Rue des Remparts y la Tour des Sorcieres hay buenas vistas del Castillo de Haut-Koenigsbourg, punto que descubrimos gracias a Descrubiendo Alsacia.

A tan solo 10 minutos de aquí, se encuentra Ribeauvillé. Este precioso pueblo es conocido como la ciudad de los tres castillos, ya que en sus colinas se encuentran el castillo St-Ulrich, el castillo Girsberg y el castillo Haut-Ribeaupierre. Un lugar donde paseamos con calma, disfrutando de sus calles, sus monumentos y sus plazas. Los puntos de mayor interés son: Fontaine du Vigneron, la Casa de los Ménétriers, la Capilla de Santa Catherine, la Place Hôtel de Ville, la Iglesia del Convento, la Torre des Bouchers, la Fuente Friedrich en la Plaza de la Sinne y la Plaza de la República.

Tras comer y pasar un rato más paseando, decidimos poner rumbo a Colmar. Justo antes de entrar a la ciudad, pudimos ver la pequeña réplica de la Estatua de la Libertad, inaugurada en 2004 para conmemorar el aniversario de la muerte de Frederic Auguste Bartholdi, nacido en Colmar y autor de la original Estatua de la Libertad de Nueva York.

Tras descansar un rato en el hotel, nos acercamos al centro de Colmar para visitar algunos de los mercadillos. Os contamos todos los que llevábamos anotados:

• Mercadillo de la Place Jeanne d’Arc.
• Mercadillo la Plaza de los Dominicanos.
• Mercadillo interior du Koïfhu.
• Mercadillo l´Ancienne Doudane.
• Mercadillo de la Petite Venise.

Mientras paseábamos por los distintos mercadillos, comenzó a nevar, así que, con todo el olor a vino caliente, canela y galletas, la iluminación, la decoración y los villancicos, nos terminamos de enamorar de esta ciudad y su preciosa estampa navideña.