El suplicio aéreo ha terminado y al fin estamos en Tokio tras unas nueve horas de vuelo aproximadamente. De esas nueve horas, en mi caso, habré usado solamente dos para dormir en condiciones, así que tendré que hincharme a cafés para aguantar todo el día por aquí. Aida en cambio…bueno, sigue teniendo la misma suerte de ser mitad humana y mitad marmota, por lo que no ha tenido mucho problema.
El viaje Moscú-Tokio empezó mal. El vuelo se retrasó más o menos una hora debido a una avería en el aire acondicionado. Una avería que sufrimos desde que nos acomodamos en el asiento, aguantando un calor terrible mientras no nos quedaba otra que abanicarnos con la hoja de instrucciones de seguridad al tiempo que la tripulación nos servía vasitos de agua templada. Por otra parte, el resto de la travesía resultó tranquila, con pocas turbulencias y sin más percances.
Al poco rato de estabilizarnos en el aire tras el despegue, comenzaron a servir la cena, en este caso compuesta por una pequeña ensalada con patata cocida, salmón ahumado y mayonesa y un plato principal de pollo con judías con una salsa que tenía un regusto a curry bastante sabrosa. De postre, un pastel de chocolate con salsa de fresa muy, muy rico. Aquí la foto:
El resto del tiempo lo pasamos intentando dormir (algunos intentando estar despiertos) y aprovechando la cartelera de cine que ofrece el servicio de entretenimiento a bordo, con películas muy actuales como Batman v Superman, Dioses de Egipto o Deadpool. El inconveniente es que solamente se puede escoger idioma ruso o inglés, este último sin subtítulos siquiera, por lo que si no estás familiarizado con la lengua de Shakespeare, poco agradecerás este servicio.
Tras varias horas de resoplar, cambiar de postura y demás, nos sirvieron el desayuno. Esto era buena señal, significaba que estábamos cerca del destino. Nos sirvieron una ensalada con queso ruso, fiambre, lechuga y huevo cocido, además de unos crepes con crema riquísimos. En esta ocasión también nos sorprendieron con una galletita de la fortuna acompañando al menú.
Por fin llegamos al aeropuerto de Narita, destrozados, pero con ganas de afrontar el día y aprovecharlo lo máximo posible. Tras canjear el Japan Rail Pass (billete único de transporte) que usaremos los próximos días, cogimos el tren Skyliner en dirección a la estación de Ueno para ponernos rumbo a nuestro hotel.
Nada más salir de la estación, nos vino a la mente el primer viaje de 2012 y es que el calorcito del averno estaba de vuelta una vez más. De todas formas, este año teníamos ganas de Sol, cuanto más, mejor, porque hay muchos festivales de verano que tenemos pendientes de visitar y podrían verse perjudicados por un simple día de lluvia, así que de momento nos quedamos con esta buena señal y esperemos que continúe así.
Tras un paseo de unos diez minutos como mucho, con las maletas a cuestas, llegamos por fin a nuestro querido Hotel Edoya, con sus entrañables recepcionistas igual de amables y risueños. Son super graciosos siempre que intentan hablar algo de castellano. Da igual que les saludes en japonés o que les hables en inglés, si eres español intentarán, al menos, darte las buenas tardes o desearte una feliz estancia en tu idioma.
Tras una ducha rápida y un breve descanso merecido en la habitación, nos pusimos en marcha hacia Akihabara, donde se encuentra una casa de cambio de divisas que, por el momento y que nosotros conozcamos, tiene el mejor cambio Euro-Yen actual (1€-112¥). Por el momento, solamente habíamos cambiado unos 50€ en el aeropuerto para comprar los billetes de tren y algunas bebidas y necesitábamos cambiar el resto para empezar a vivir por aquí. La casa de cambio en cuestión, se llama «Ninja money exchange», no es broma. Supongo que por estar bastante escondida, ya que se sitúa en la quinta planta de un edificio de viviendas sin cartel indicador en el exterior. Sobran las palabras, os dejamos su vídeo de presentación y un par de fotos.
Una vez convertidos los euros en yenes, nos dirigimos a una tienda combini a comprar algo para comer, que ya eran horas. Hacía muchísimo ya desde nuestro último onigiri (bola de arroz rellena, con un envoltorio de alga nori) así que decidimos devorar uno relleno de atún con mayonesa. Delicioso. Además, nos atrevimos con unos pequeños calamares secos a modo de snack, que aunque parezca mentira, están bastante ricos aunque cuesta un poco comerlos por estar bastante duros. Para beber, decidimos tomarnos un Calpis, una bebida refrescante que llevábamos tiempo esperando probar. Para que os hagáis una idea, tiene un sabor parecido a un Sprite o 7up, quizás algo más dulce.
Bien alimentados, nos dirigimos a la estación de metro para tomar un tren hasta el barrio de Asakusa para ver los fuegos artificiales que se celebran cada año junto al río Sumida. A modo de competición entre distintas empresas de pirotecnia, este espectáculo, el mayor de todo Tokio al menos, es un punto de encuentro en el que personas de todas las edades se reúnen para disfrutar en familia, en pareja o simplemente grupos de amigos para tomarse unas cervezas al son de las explosiones de color en el cielo tokiota. Podéis ver un pequeño vídeo que hemos subido a nuestro Instagram para que os hagáis una idea.
Para terminar la jornada y mientras aún seguían retumbando los fuegos de fondo, decidimos comprar algo para cenar en uno de los numerosos puestos de comida que había por la zona con motivo del festival. Esta vez nos decantamos por unos Takoyaki (bolas de harina rellenas de pulpo) y un par de brochetas de salchicha. Todo listo para sentarnos un rato en el suelo acompañados de un par de cervezas y finalizar así nuestro primer día en Japón.
Muchísimas gracias a todos los que perdéis un poco de vuestro tiempo para leernos.
Mañana más y mejor!
Salud!
Cumpliendo con la lectura obligatoria ,un besin y que descanséis ????????
No deja de asombrarme vuestra desenvoltura: «compramos esto y comimos aquello». Yo no sabría ni por donde empezar frente a estos puestos de comida… Si ya lo paso mal para decidirme en los semana negra!
Y gracias a vosotros por tomados los molestia de dedicar un rato, por cansados que estéis, para que podamos acompañaros en este viajazo.
¡Fantástico ya el primer día! Qué ganas de seguir leyéndoos y viendo vuestras fotos… ????????????????????????????????
Ay madre….diarios en bicicleta. ..y nada que todo do k ..y…requetek. .pero yo dura…Os lo aunque rezuma Japón por las orejas….que no es santo de mi devoción. ..pero…como te quiero …te leo…
A seguir disfrutando del viaje!!! Nosotros esperamos ansiosos la entrada de mañana!!
Un besín doña marmota jeje y otru pa ti Fon!! :*
WAAA como molan lo de los fuegos, no tenia ni idea de que existía esa competición tubo que ser impresionante !!.
FAN de lo del calamar, siempre me ha llamado mucho la atención esos snack de «pescados» que tienen…y si decís que no esta tan mal os creo XD por cierto el Calpis es lo mas!!
Por cierto casi me muero con la tienda de cambio de divisas son geniales !!