Konichiwa!!

Por fin estamos aquí :). Desde que despegamos de Moscú han pasado muchas horas, ha sido un día muy largo y apenas hemos dormido…pero aún así, no podíamos estar más contentos.

Lo primero que nos sorprendió del vuelo desde Rusia fue el avión. En primer lugar por el espacio y en segundo por las pantallitas en los respaldos de los asientos, desde las que podíamos ver películas, vídeos musicales, documentales, escuchar música e incluso ver el despegue y el aterrizaje del avión mediante unas cámaras acopladas al mismo…pero lo más importante, si le dabas la vuelta al mando, voilà! Ya tenías un gamepad para echar unos vicios XD. Eran juegos cutrecillos por lo general, diseñados exclusivamente para esos equipos, pero había dos originales: Pacman y Pong.

El resto del viaje transcurrió con normalidad pero se nos hizo muuuuuuy largo y muuuuuy pesado, ya que no había manera de quedarse dormido…así es que ahora mismo estamos muertos casi literalmente. La comida, de nuevo, estaba muy rica. Para cenar nos dieron una ensalada césar, pollo con salsa y noodles (fideos) y tarta de chocolate con mermelada de mora.

Cuando empezamos a divisar la isla desde la ventanilla, no nos lo podíamos creer…y ya cuando vimos al gran Fuji asomando entre las nubes, solo nos faltó echar la lagrimilla.

Una vez en tierra y tras los correspondientes saludos cordiales de las azafatas del aeropuerto de Narita, nos dispusimos a pasar los controles policiales correspondientes, todo ello sin ningún percance. Como anécdota, yo llevaba puesta una camiseta de Alex Kid en la que aparecía un texto en japonés que no teníamos ni idea de qué podría significar. Nos sirvió para hacer la coña durante todo el viaje.

El tema se calentó en dicho control policial, cuando el agente se me queda mirando la camiseta, la lee para sí y comienza a reirse. Lógicamente la coña se convirtió en mosqueo y desde ese mismo momento, hice lo que pude por ocultar el texto con los brazos o la chaqueta.

Hubo un instante de despiste, cuando un amable señor en la oficina de cambio de divisa me llama y me señala la camiseta riéndose…Yo avergonzado de nuevo le pregunto qué significa y para alivio de todos me responde «Alex Kid in Miracle World» Toma!, toma!, toma! el nombre completo del juego…a partir de ahí fui exhibiendo mi camiseta como un modelo, todo orgulloso.

Bueno, tras cambiar el dinero, el JR Pass (billete único de transporte exclusivo para turistas), cogimos un tren rumbo a La estación Ueno, la más cercana a nuestro hotel. Fue un viaje de unos 90 minutos más, en el que no pudimos evitar unirnos a la costumbre nipona de dormirse durante el trayecto.

Tras llegar a la estación pudimos comprobar el calor que hace realmente aquí…sofocante. Así que sin más dilación y plano en mano, nos pusimos rumbo al hotel con un porcentaje de éxito del 99%…ya que terminamos por preguntarle a un obrero japonés por la dirección del alojamiento mientras lo teníamos delante de nuestros ojos…en fin.

Ducha rápida, ropa limpia y para Akihabara!! Al salir del hotel y dirigirnos hacia allí fue cuando empezamos a darnos cuenta de dónde estábamos…éramos los únicos extranjeros en toda la calle. El resto de la tarde transcurrió entre fotos, mucha risa, figuras, figuras, muñecas, más figuras, videojuegos…buff!! Este sitio es increíble chicos!

Una de las cosas que más nos llamó la atención fue el Club Sega, que estaba lleno de máquinas de estas de «coge el juguete con el gancho, bueno, inténtalo, porque la garra está trucada siempre y no aprieta con fuerza» y los japoneses se dejan literalmente la pasta en ellas. Es espectacular el nivel de pique y el nivel de adicción que tienen. Lo mejor de todo, que haya tenido que venir un español y tras tres intentos…zasca!! Muñequita japo para Aida XD (hay foto de la triunfada)

También visitamos el Gundam Café, con una decoración muy chula, música del anime y muy buen ambiente. Ahí nos tomamos unos refrescos y un aperitivo típico japonés: Nachos con queso y jalapeños, manitoo!! XD

Después seguimos viendo y viendo tiendas…y lo que nos queda!! Para finalmente comprar comida para llevarla al hotel y cenar. Lógicamente de un restaurante típico japonés: Kentucky Fried Chicken, jajaja.

Ha sido un post muy largo pero tenía que ir acorde con la situación. Ahora mismo son las 21:51 y estamos en el hall del Hotel escribiendo estas líneas para intentar transmitiros un poco de esta vivencia.

Espero que os haya gustado,

Mañana más y mejor!!

Konbanwa!